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Coomaraswamy Satã

quarta-feira 27 de dezembro de 2023, por Cardoso de Castro

  

Ananda Coomaraswamy   — ARTIGOS SELETOS DE METAFÍSICA
QUEM É SATÃ E ONDE ESTÁ O INFERNO?
«El que hace el pecado es del Diablo» I San Juan 3:8

Que en este día y edad, en que «para la mayoría de las gentes la religión ha devenido un refugio arcaico e imposible» [1], los hombres no toman ya seriamente a Dios ni a Satán, se desprende del hecho de que han llegado a pensar en ambos solo objetivamente, solo como personas externas a sí mismos y en favor de cuya existencia no puede encontrarse ninguna prueba adecuada. Lo mismo se aplica, por supuesto, a las nociones de sus reinos respectivos, el cielo y el infierno, en los cuales se piensa como tiempos y lugares que no son ni de ahora ni de aquí.

De hecho, nosotros mismos hemos pospuesto el « sobre la tierra», al pensarlo como una Utopía material que, esperamos ansiosamente, ha realizarse por medio de uno o más planes quinquenales, olvidando el hecho de que el concepto de un progreso sin fin es el de una persecución «en la cual tú debes trabajar eternamente» [2], —una frase menos sugestiva del cielo que del infierno. Lo que esto significa realmente es que nosotros hemos elegido un infierno presente en substitución de un cielo futuro que nunca conoceremos.

La doctrina que hay que afrontar, sin embargo, es que «el está dentro de vosotros», aquí y ahora, y que, como Jacob Boehme  , entre otros, ha dicho tan a menudo, «el cielo y el infierno están por todas partes, puesto que son universalmente extensos... Tú estás por consiguiente en el cielo o en el infierno... El alma tiene el cielo o el infierno dentro de sí misma» [3], y no puede decirse que «vaya a» uno u otro cuando el cuerpo muere. Aquí, quizás, puede buscarse la solución del problema de Satán.

Se ha reconocido que la noción de una «persona» satánica, el principal de muchos «ángeles caídos», representa algunas dificultades: inclusive en religión, emerge la dificultad de un «dualismo» maniqueo; al mismo tiempo, si se mantiene que algo no es Dios, la infinitud de Dios queda por ello mismo circunscrita y limitada. ¿Es «él», Satán, por consiguiente una persona, o meramente una «personificación», es decir, una personalidad postulada? [4] ¿Quién es «él», y dónde está? ¿Es una serpiente o un dragón, o tiene cuernos y un rabo venenoso? ¿Puede ser redimido y regenerado, como Orígenes   y los muslimes han creído? Todos estos problemas cuentan juntos.

  •  Dualismo
  •  Psyche
  •  Inimigos
  •  Ego
  •  BATALHA DE AMOR
  •  HIEROS GAMOS
  •  SATÃ E INFERNO

  • [1Margaret Marshall en The Nation, 2 de Febrero de 1946.

    [2Jacob Boehme, De incarnatione Verbi, II. 5.18.

    [3Jacob Boehme, "Of Heaven and Hell", pp. 259, 260.

    [4«No puede afirmarse la persona... de las cosas vivas... desprovistas de intelecto y razón... pero nosotros decimos que hay una persona de un hombre, de Dios, de un Ângel» (Boecio, Contra Eutiquio II) Sobre esta base, Satán, que permanece un ángel inclusive en el infierno, puede ser llamado una Persona, o en verdad, Personas, puesto que su nombre es «Legión: pues nosotros somos muchos»; pero como un ser caído, «fuera de su mente recta», es en realidad una Persona solo potencialmente. Otro tanto podría decirse del alma, a saber, que hay una Persona del alma, pero difícilmente podría decirse que el alma, como ella es en sí misma, es una Persona. Satán y el alma, ambos igualmente invisibles, son solamente «conocidos», o más bien «inferidos», por el comportamiento, que es justamente lo que la «personalidad» implica: «personalidad, es decir, la unidad hipotética que uno postula para dar cuenta de los hechos de las gentes» (H. S. Sullivan, «Introduction to the Study of Interpersonal Relations», «Psychiatry.», I, 1938).