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A Teurgia
terça-feira 30 de abril de 2024
CIÊNCIAS TRADICIONAIS — TEURGIA
VIDE: TEURGIA JUDAICA
René Guénon: FORMAS TRADICIONAIS E CICLOS CÓSMICOS
No es decir, por lo demás, que sea menester negar por eso la posibilidad de las transmutaciones metálicas, que representan la alquimia a los ojos del vulgo; pero es menester no confundir cosas que son de orden completamente diferente, y uno no ve siquiera, «a priori», por qué tales transmutaciones no podrían ser realizadas por procedimientos que relevan simplemente de la química profana (y, en el fondo, la «hiperquímica» a la cual hacíamos alusión hace un momento no es otra cosa que eso). Hay empero otro aspecto de la cuestión, que M. Evola señala muy justamente: El ser que ha llegado a la realización de ciertos estados interiores puede, en virtud de la relación analógica del «microcosmo» con el «macrocosmo», producir exteriormente unos efectos correspondientes; es pues admisible que el que ha llegado a un cierto grado en la práctica de la alquimia espiritual sea capaz por ello mismo de cumplir transmutaciones metálicas, pero eso a título de consecuencia del todo accidental, y sin recurrir a ninguno de los procedimientos de la pseudo-alquimia material, sino únicamente por una especie de proyección al exterior de las energías que lleva en sí mismo. Hay aquí una diferencia comparable a la que separa la «teurgia» o la acción de las «influencias espirituales» de la magia e inclusive de la brujería: Si los efectos visibles son a veces los mismos de una y otra parte, las causas que los provocan son totalmente diferentes. Agregaremos por lo demás que los que poseen realmente tales poderes no hacen generalmente ningún uso de los mismos, al menos fuera de ciertas circunstancias muy particulares en las que su ejercicio se encuentra legitimado por otras consideraciones. Sea como fuere, lo que jamás hay que perder de vista, y lo que está en la base misma de toda enseñanza verdaderamente iniciática, es que toda realización digna de este nombre es de orden esencialmente interior, ello, aún cuando que la misma es susceptible de tener repercusiones en el exterior; el hombre no puede encontrar los principios y los medios para ella más que en sí mismo, y puede porque lleva en sí la correspondencia de todo lo que existe: el-insânu ramzul-wujûd, «el hombre es un símbolo de la Existencia universal»; y, si llega a penetrar hasta el centro de su propio ser, alcanza por ahí mismo el conocimiento total, con todo lo que implica por añadidura: man yaraf nafsahu yaraf Rabbahu, «el que conoce su Sí mismo conoce su Señor» y conoce entonces todas las cosas en la suprema unidad del Principio mismo, fuera del cual nada hay que pueda tener el menor grado de realidad.
Frithjof Schuon : O ESOTERISMO COMO PRINCÍPIO E COMO VIA
Está na natureza do homem — visto que combina o exterior com o interior — utilizar suportes sensíveis tendo em vista o progresso do seu espírito ou o equilíbrio da sua alma. Esses suportes são artísticos e, portanto, simbolistas e estéticos, ou teúrgicos. Neste último caso, sua função é veicular as forças benéficas, protetoras e santificantes; aliás, os dois gêneros podem combinar-se. Propomo-nos a falar aqui da segunda categoria ou, mais precisamente, de um caso particular, o das relíquias, cuja função com efeito concerne à liturgia, indiretamente, pelo menos. Dizemos teurgia e não magia, visto que as forças que agem neste caso têm sua razão de ser e sua fonte essencial na Graça divina e não na arte humana. Para tratar deste assunto, basta uma resposta a duas objeções, uma visando à autenticidade das relíquias e a outra à sua eficácia.
A fenomenologia teúrgica engloba não só os símbolos sagrados, os suportes de fluidos celestes e as graças subjetivas, mas também, e sobretudo, os ritos, em que o homem coopera ativamente para uma teurgia salvadora. Por "fenomenologia" entendemos simplesmente o estudo de uma categoria de fenômenos, e não determinada filosofia que pretende tudo resolver, registrando ou explorando à sua maneira os fenômenos que se apresentam à consciência, sem poder explicar esse fenômeno central e incompreensível, que é o mistério da subjetividade.
Simbolismo Umberto Eco : TEURGIA
Ver online : René Guénon