Ananda Coomaraswamy — ARTIGOS SELETOS DE METAFÍSICA
REMINISCÊNCIA, INDIANA E PLATÔNICA (cont.)
ESQUECIMENTO E NÃO-ESQUECIMENTO
No menos destacable es el hecho de que mosa, musa (mrsa), «falso», es regularmente opuesto a saccam (satyam), «verdadero»; y puesto que este musa, mrsa deriva de mussati, mrs, «ignorar», «olvidar», «descuidar», resulta claro que «no-verdadero» coincide con «olvidado». De la misma manera, aunque inversamente, lethe es «olvido», «olvidar», y aletheia es «verdad» o literalmente «no-olvido». Por consiguiente, o alethes ouranos (Fedón 109E) no es meramente «cielo verdadero o real» sino también «cielo donde no hay olvido», y donde, por la misma razón, los dioses «nunca aprenden» debido a que jamás hay nada ausente de su conocimiento (Plotino, IV.4.7); de la misma manera el to aletheias medion de Platón no es meramente «llanura de la verdad» sino también la «tierra del no olvido», y lo opuesto del to lethes pedion, la «tierra del olvido» de Aristófanes) (Las Ranas), 186). Leto es así mismo de la ralea mortal de la Discordia (Hesíodo, Teogonia 227), y también para Shakespeare significa «muerte»; de modo que la «tierra del no-olvido» es también la «tierra de la inmortalidad». En el sentido en que nosotros somos lo que conocemos, y en que ser y conocer son lo mismo (to gar auto noein estin te kai einai)1, la recordación es la vida misma y el olvido un brebaje letal.
Hermann Diels, ed., Die Fragmente der Vorsokratiker (Berlín, 1903), fr. 18B 5. Cf. Maitri Upanishad VI.34.3, yac cittas tanmayo bhavati, «Lo que es el pensamiento de uno, eso él deviene», y San Agustín, Confesiones XIII.11, «esse, nosse, velle. in his tribus. et una vita mens et una essentia». ↩