Página inicial > Termos e noções > Trimurti

Trimurti

quinta-feira 25 de janeiro de 2024

  

O termo pertence especificamente ao vocabulário do Xivaísmo, mas designa uma noção vai muito além. De fato, a ideia de uma triplicidade divina, onde cada elemento corresponde a uma das atividades cósmicas, emissão, manutenção, reabsorção, se encontra também não só nas seitas vixnuístas mas também na tradição mais geral da Índia. A Brama se imputa a criação ou melhor a emissão do mundo, a Vishnu sua manutenção, a Shiva sua destruição. Mas nos cultos sectários, a estas três atividades cósmicas especializadas sobrepõe-se um princípio superior e imutável que as engloba e do qual eles não são senão manifestações. A iconografia confirma aqui os textos envelopando as três faces divinas de uma quarta cabeça, Sadashiva, O Shiva eterno: aí está verdadeiramente a Trimurti. (extrato traduzido de LES NOTIONS PHILOSOPHIQUES  )

Perenialistas
René Guénon: SHIVAISMO

Ishvara es considerado bajo una triplicidad de aspectos principales, que constituyen la Trimurti o «triple manifestación», y de los cuales derivan otros aspectos más particulares, secundarios en relación a esos. Brahma es Ishwara en tanto que principio productor de los seres manifestados; es llamado así porque se considera como el reflejo directo, en el orden de la manifestación, de Brahma, el Principio supremo. Es menester destacar, para evitar toda confusión, que la palabra Brahma es neutra, mientras que Brahma es masculino; el empleo, corriente en los orientalistas, de la forma Brahman, que es común a los dos géneros, tiene el grave inconveniente de disimular esta distinción esencial, que también se marca a veces por expresiones como Para-Brahma o el «supremo Brahma» y Apara-Brahma o el «no supremo Brahma». Los otros dos aspectos constitutivos de la Trimûrti, que son complementarios el uno del otro, son Vishnu, que es Ishvara en tanto que principio animador y conservador de los seres, y Shiva, que es Ishvara en tanto que principio, no destructor como se dice comúnmente, sino más exactamente transformador; así pues, se trata de «funciones universales», y no de entidades separadas y más o menos individualizadas.

Cada uno de los «aspectos divinos» se considera como dotado de un poder o energía propia, que se llama shakti, y que se representa simbólicamente bajo una forma femenina; la shakti de Brahma es Saraswatî, la de Vishnu es Lakshmî y la de Shiva es Pârvati. Ya sea entre los shaivas, o ya sea entre los vaishanavas, algunos se vinculan más particularmente a la consideración de las shaktis, y por esta razón son llamados shâktas. Además, cada uno de los principios de los que acabamos de hablar puede ser considerado aún bajo una pluralidad de aspectos más particularizados, y de cada uno de ellos derivan también otros aspectos secundarios, derivación que, muy frecuentemente, se describe como una filiación simbólica. Evidentemente, no podemos desarrollar aquí todas estas concepciones, tanto más cuanto que nuestro propósito no es precisamente exponer las doctrinas mismas, sino sólo indicar con qué espíritu deben estudiarse si se quiere llegar a comprenderlas.