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Sociologia

quinta-feira 25 de janeiro de 2024

  

Perenialistas
René Guénon: Guenon Filosofia Moderna - DEFORMAÇÕES FILOSÓFICAS MODERNAS

Eso resulta en efecto de la manera en que Comte considera las diferentes ciencias: para él, han llegado sucesivamente al «estado positivo» en un cierto orden, donde cada una de ellas ha sido preparada por las que preceden y sin las cuales no habría podido constituirse. Ahora bien, la última de todas las ciencias según este orden, aquella por consiguiente en la que todas confluyen y que representa así el término y la cima del conocimiento llamado «positivo», ciencia a la que Comte se ha dado él mismo en cierto modo la «misión» de constituir, es aquella a la que ha atribuido el nombre bastante bárbaro de «sociología», nombre que ha pasado desde entonces al uso corriente; y esta «sociología» es propiamente la ciencia del Hombre, o, si se prefiere, de la Humanidad, considerada naturalmente solo bajo el punto de vista «social»; por lo demás, para Comte, no puede haber otra ciencia del Hombre que no sea ésta suya, ya que cree que todo lo que caracteriza especialmente al ser humano y le pertenece en propiedad, a exclusión de los demás seres vivos, procede únicamente de la vida social. Desde entonces era perfectamente lógico, a pesar de lo que algunos hayan podido decir de ello, que llegará allí donde ha llegado de hecho: empujado por la necesidad más o menos consciente de realizar una suerte de paralelismo entre el «estado positivo» y los otros dos «estados» tales como se los representaba, Comte vio su acabamiento en lo que ha llamado la «religión de la Humanidad» [1]. Así pues, vemos aquí, como término «ideal» de los tres «estados», respectivamente a Dios, la Naturaleza y la Humanidad; no insistiremos más en ello, ya que esto basta en suma para mostrar que la famosísima «ley de los tres estados» proviene realmente de una deformación y de una aplicación falseada del ternario Deus Homo Natura - Deus, Homo, Natura, y lo que es más bien sorprendente es que parece que nadie se haya dado cuenta nunca de ello.


Observações

[1La «Humanidad», concebida como la colectividad de todos los hombres pasados, presentes y futuros, es en Comte una verdadera «personificación», ya que, en la parte pseudoreligiosa de su obra, la llama el «Gran Ser»; se podría ver en ello como una suerte de caricatura profana del «Hombre Universal».