hoplon / ὅπλον / arma / armas / μάχαιρα / machaira / espada / sword / λόγχη / logche / lança / ἀξίνη / axine / doble hacha / σφυρί / sphyri / martelo / arqueria / arco e flecha

La espada puede ser considerada, de modo general, como un arma de doble filo [1]; pero un ejemplo aún más notable es el de la doble hacha, que pertenece en particular al simbolismo egeo y cretense, o sea prehelénico, pero no es exclusiva de él. Ahora bien; el hacha, como lo hemos explicado antes ("Les pierres de foudre" (aquí, cap. XXV; "Las ‘piedras del rayo’", es muy especialmente un símbolo del rayo y por lo tanto, a este respecto, un equivalente estricto del vajra; y la comparación de estas dos armas muestra, por consiguiente, la identidad profunda de las dos formas de simbolismo mencionadas, la de las armas de doble filo y la de las armas de doble punta. [AS ARMAS SIMBÓLICAS]

Hablando anteriormente de las "flores simbólicas", nos vimos llevados a aludir a la lanza que en la leyenda del Graal aparece como un símbolo complementario de la copa y es una de las numerosas figuras del "Eje del Mundo" [A este respecto, el complementarismo de la lanza y la copa es estrictamente comparable al de la montaña y la caverna, sobre el cual volveremos más adelante.]. Al mismo tiempo, esa lanza es también, decíamos, un símbolo del "Rayo celeste", y, según las consideraciones que hemos desarrollado en otro lugar [Le Symbolisme de la Croix  ], es evidente que ambas significaciones en el fondo coinciden: pero esto explica igualmente el que la lanza, como la espada y la flecha, que son en suma sus equivalentes, sea asimilada a veces al rayo solar. Debe quedar bien claro que los dos simbolismos, el polar y el solar, no deben nunca ser confundidos, y que, según lo hemos indicado a menudo, el primero tiene un carácter más fundamental y realmente "primordial"; pero ello no quita que lo que podría llamarse "transferencias" de uno a otro constituya un hecho frecuente, cuyas razones trataremos quizá de explicar más netamente en alguna otra ocasión [Símbolos da Ciência Sagrada, Simbolismo Chifres - cap. XXVIII].

Es lo que figuran también algunas armas de doble corte, concretamente, en el simbolismo de la Grecia arcaica, el doble hacha, cuya significación puede ser aproximada a la del caduceo. - Por otra parte, el rayo era representado en la tradición escandinava por el martillo de Thor, al que se puede asimilar el mazo del Maestro en el simbolismo masónico; así pues, éste es también un equivalente del vajra, y, como él, tiene el doble poder de dar la vida y la muerte, así como lo muestra su papel en la consagración iniciática por una parte y en la leyenda de Hiram por otra. [René Guénon: SOLVE E COAGULA ]

El mallete o martillo de Thor, otro símbolo del rayo que hemos señalado también, presenta, por su forma en T, una exacta similitud con la doble hacha. Haremos notar también que, como el mallete y la espada, aunque menos en evidencia que éstos, el hacha se encuentra aún hoy en el simbolismo masónico. [René Guénon: AS ARMAS SIMBÓLICAS]

Por ser a ponta da flecha divina (anika), Agni Anikavat é a parte essencial dessa flecha que não se desvia e com a qual os deuses feriram o dragão no começo; e também é virtualmente a flecha toda, visto que “para onde vai a ponta vai a flecha toda” (Satapatha Brahmana   II.3.3.10, II.5.3.2, II.5.4.3.8; Aitareya Brahmana   1.25 etc.). Vem a ser o mesmo que ele também seja a ponta da flecha da besta (vajra) com que o dragão foi ferido (Satapatha Brahmana II 1.4.4.14), pois é da ponta desta flecha como seu étimo que as flechas são “derivadas” (Taittiriya Samhita VI.1.3.5; Satapatha Brahmana 1.2.4.1); vajra também significa “adamantino” e em geral vemos que as flechas do herói solar “têm a ponta adamantina”. Do conceito de amor (kama) como um fogo e da ideia de Agni ter “cinco mísseis” vem a iconografia de Kama-deva, deus do amor, como arqueiro.

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Em outras palavras, o manejo do arco e flecha é literalmente “uma devoção”. Em Jataka V.127s., Jotipala é enviado a um Mestre em Takka-sila para aprender toda a arte (sippam). É feito um pagamento de “um mil”. Quando o menino já está capacitado no manejo do arco e flecha recebe do mestre uma espada e “um arco de chifre de carneiro não-castrado e uma aljava, muito bem combinados entre si” (sandhiyutta-), assim como o corselete e o turbante (estabelecendo desse modo o discípulo como mestre na sucessão devida). [AKCcivi  :Nota]