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psyche / ψυχή / psyché / psykhé / ψύχω / psycho / ψῦχος / anima / animus / ἄψυχον / apsychon / alma / âme / the soul / psique / alma individual / individual soul

  

gr. ψυχή, psyché ou psykhé (he): respiração de vida, fantasma, princípio vital, alma. Latim: anima. Princípio, de natureza vital ou espiritual; mais habitualmente, das duas ao mesmo tempo; princípio que anima o corpo. gr. ἄψυχον, apsychon: inanimado.


Ψυχή is an οὐσία whose basic aspects, for Aristotle  , are κρίνειν and κινεῖν—the “setting apart and determining” and the “moving-itself” in the world, the moving-about-within-the-world. They provide the ground for the further concrete distinguishing of being-in-the-world, in the further development of the possibility of ἑρμηνεύειν. [Heidegger  , GA18:44]

Werner Jaeger

Mas que é a "alma", ou a psyche (para exprimi-la com a palavra grega usada por Sócrates  )? Antes de tudo, coloquemos esta questão num sentido meramente filológico. Procedendo assim, damo-nos conta de que Sócrates, tanto em Platão   como nos outros socráticos, sempre coloca na palavra "alma" uma ênfase surpreendente, uma paixão insinuante e como que um juramento. Antes dele, nenhum sábio grego pronunciou assim esta palavra. Temos a sensação de que, pela primeira vez no mundo ocidental, surge aqui algo que ainda hoje designamos com certa ligação à mesma palavra, ainda que os psicólogos modernos não lhe associem a ideia de uma "substância real". A palavra "alma", pelas suas origens na história do espírito, tem sempre para nós uma conotação de valor ético ou religioso. Tem um tom cristão, como as expressões "serviço de Deus" e "cuidado da alma". Ora, é nas prédicas protrépticas de Sócrates que a palavra "alma" adquire pela primeira vez este alto significado. [Werner Jaeger  , Paideia]

Joseph Moreau

É em Platão principalmente no Timeu  , que se encontra a exposição mais explícita da concepção de Alma do Mundo. O Timeu tem por objeto fornecer uma explicação verídica da gênese do Universo. A Alma do Mundo não seria então nada de outro que a organização universal, concebida então pelo Demiurgo, em seguida introduzida na indeterminação da "chora". Assim o Vivente absoluto, A Alma do Mundo e o Universo sensível vêm a corresponder a três modalidades da organização, que coincidem em uma só e mesma representação e não podem ser distinguidas senão por sua função lógica e dialética. [Joseph Moreau, L’Âme du Monde de Platon aux Stoïciens]

Christophe Andruzac

Segundo Christophe Andruzac, observando que o crescimento biológico de um cão difere daquele de uma vaca, induzo da experiência que o cão possui um dinamismo vital, uma causa-de-vida diferente daquela da vaca; chama-se tradicionalmente «alma» este princípio vital.

Vide neste glossário sobre as três partes da alma (divisão tripartite da alma):

  • logistikon - aspecto inteligente
  • epithymetikon - aspecto apetitivo
  • thymikon - aspecto irascível

Anthony Damiani

Segundo Anthony Damiani  , Plotino   aponta que a Alma é um conteúdo da Mente Divina incluído com outros Seres Divinos, permanentemente estacionado e residente aí (Enéada IV.1.1). Pode-se tomar isto como significando que a Alma Absoluta eternamente engendra almas. Cada uma e toda alma, originária da Alma Absoluta, é similar a, mas não idêntica com, sua predecessora.

Esta emanação, este pensamento da Mente de Deus — nosso Eu Absoluto — é o que se deve investigar pois é a chave para os mistérios. Esta unidade de Ser-Vida-Consciência segue «formada da essência não dividida e da essência dividida entre corpos» (Enéada IV.1.1). Pode-se referir a isto como a alma individual ou mente; este ponto, que é combinação da mente ou alma com a Ideia-Mundo, é nossa individualidade absoluta ou Sobre-Si. [ASTRONOESIS]

Teofano o Recluso

Teófano y los otros autores citados en el Arte de la Oración, distinguen en el hombre tres elementos: el cuerpo, el alma y el espíritu, que Teófano describe así: "El cuerpo está hecho de tierra; no es por lo tanto algo muerto, sino por el contrario, algo vivo, provisto de un alma viviente. En esta alma ha sido insuflado un espíritu, el espíritu de Dios, destinado a conocerlo, glorificarlo, buscarlo y a gustar y encontrar la alegría en El y en ninguna otra cosa". El alma es, por consiguiente, el principio fundamental de la vida, lo que hace de un ser humano algo viviente, por oposición a una masa de carne inanimada. Sin embargo, mientras que el alma existe ante todo sobre el plano natural, el espíritu nos pone en contacto con el orden de las realidades divinas. Es la facultad más elevada del hombre y la que nos hace aptos para entrar en comunión con Dios. En tanto que tal, el espíritu del hombre está estrechamente ligado a la tercera Persona de la Santa Trinidad, el Espíritu Santo o Espíritu de Dios; pero, a pesar de esta estrecha conexión, no son idénticos. Confundirlos nos conduciría al panteísmo.

El cuerpo, el alma y el espíritu tienen, cada uno su manera particular de conocer: el cuerpo conoce por los cinco sentidos, el alma por el razonamiento intelectual, el espíritu por la conciencia, por una percepción mística que trasciende los procedimientos ordinarios de la razón humana.

Antonio Orbe

Dígase lo propio del alma. ¿Qué diferencia hay del alma separada al ángel? Según las categorías origenianas, ninguna. Aun cuando la hubiese, del alma a Dios hay menos distancia ontológica que de la carne.

Orígenes   y San Hilario tienen expresiones bien gráficas sobre el parentesco del alma con Dios: extraña comunidad de naturaleza entre ambos, y connaturalidad mental e inclinación afectiva de la psyche para con Dios. Cf. Origen., Mart. 47: «Gusta además el hombre de vivir convencido de que la sustancia del alma racional tiene cierta afinidad (syngenes ti) con Dios, pues ambos son intelectuales, invisibles e incorpóreos... Así como cada parte del cuerpo dice relación a algo — el ojo a lo visible, el oído a los sonidos — , el intelecto la dice a lo inteligible y a Dios, más allá de lo inteligible». Para la comunidad natural, De Princ. IV 4,9 (362,3ss).

Hilario habla de la ‘cognatio generis caelestis’, origen en el alma del amar a deseo de Dios. Frente a la estirpe terrena del cuerpo, posee el alma la ‘origo caelestis’ y divina; creada ‘secundum originem Dei’. Cf. Tr. ps. 149,3; 119,19; 62,3. Otros muchos lugares, en A. Fierro, San Hilario 19s; E. des Places, Syngeneia (París 1964) p.l91ss; Festugière  , Hermétisme et Mystique Paienne (París 1967) p.272ss a propósito de Arnobio, Adv. Gentes II, 15-16.

La psyche tiene mucho andado en su inmaterial natura para asemejarse al Espíritu. No obstante, persevera ‘facta’ y con tendencia al no ser. El salto del ‘factus’ al ‘infectus’ sería aun en ella infinito, como en el ángel. Para darlo, convendría normalmente alguna prueba; pero fuera del tiempo y de la historia.

San Ireneo entiende muy bien el abismo que media entre todo lo creado y el Creador. Mas al abordar el problema de la deificación y destacar la lentitud de la acción de Dios sobre lo creado, se atiene siempre al hombre, compuesto de cuerpo y alma, y se fija en la dificultad de habilitar la carne a la vista de Dios. En tesis, la distancia de las creaturas a Dios es igual sin distinción. En concreto, no. Es más, según expresión de San Hilario, el alma, por su continua movilidad, sostén de las demás propiedades, participa en la naturaleza misma de Dios.

¿Qué trabas puede el alma ofrecer a la deificación cuando en su misma movilidad denuncia una característica de la natura divina? [ANTROPOLOGÍA DE SAN IRENEO]