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HDV: discípulo

quinta-feira 1º de fevereiro de 2024

  

Shankarâchârya agrega a este pasaje el comentario siguiente: "Un discípulo que ha seguido atentamente la exposición de la naturaleza de Brahma debe ser llevado a pensar que conoce perfectamente a Brahma (al menos teóricamente); pero, a pesar de las razones aparentes que puede tener para pensar así, por eso no es menos una opinión errónea. En efecto, la significación bien establecida de todos los textos concernientes al Vêdânta es que el "Sí mismo" de todo ser que posee el Conocimiento es idéntico a Brahma (puesto que, por este Conocimiento mismo, se realiza la "Identidad Suprema"). Ahora bien, de toda cosa que es susceptible de devenir un objeto de conocimiento, es posible un conocimiento distinto y definido; pero ello no es así para Lo que no puede devenir un tal objeto. Eso es Brahma, ya que Él es el Conocedor (total), y el Conocedor puede conocer las demás cosas (puesto que las encierra a todas en Su infinita comprehensión, que es idéntica a la Posibilidad Universal), pero no hacerse a Sí mismo el objeto de Su propio Conocimiento (ya que, en Su identidad que no resulta de ninguna identificación, no se puede hacer siquiera, como en la condición de Prâjna, la distinción principial de un sujeto y de un objeto que son sin embargo "el mismo", y ya que no puede dejar de ser Sí mismo "omniconocedor", para devenir "omniconocido", lo que sería otro Sí mismo), de la misma manera que el fuego puede quemar otras cosas, pero no quemarse a sí mismo, (puesto que su naturaleza esencial es indivisible, como, analógicamente, Brahma es "sin dualidad") [NA: Ver Brihad-Âranyaka Upanishad  , 4º Adhyâya, 5º Brâhmana, shruti 14: "¿Cómo el Conocedor (total) podría ser conocido?".]. Por otra parte, no puede decirse tampoco que Brahma pueda ser un objeto de conocimiento para otro que Sí mismo, ya que, fuera de Él, no hay nada que sea conocedor (puesto que todo conocimiento, incluso relativo, no es más que una participación del Conocimiento absoluto y supremo)" [NA: Aquí todavía, podemos establecer una aproximación con esta frase del Tratado de la Unidad   (Risâlatul-Ahadiyah) de Mohyiddin ibn Arabi  : "No hay nada, absolutamente nada que exista excepto Él (Allah), pero Él comprende Su propia existencia sin que (no obstante) esta comprensión exista de una manera cualquiera".]. 239 HDV XV

Shankarâchârya enumera tres atributos que corresponden en cierto modo a otras tantas funciones del Sannyâsî poseedor del Conocimiento, el cual, si este conocimiento es plenamente efectivo, no es otro que el Yogî [NA: El estado de Sannyâst es propiamente el último de los cuatro âshramas (los tres primeros son los de Brahmachârî o "estudiante de la Ciencia sagrada", discípulo de un Guru, de Grihastha o "amo de la casa", y de Vanaprastha o "anacoreta"); pero el nombre de Sannyâts también se extiende a veces, como se ve aquí, al Sâdhu, es decir, al que ha cumplido la realización perfecta, y que es ativarnâshramî, así como lo hemos dicho más atrás.): estos tres atributos son en el orden ascendente, bâlya, pânditya, y mauna (Comentario sobre los Brahma-Sûtras  , 3er Adhyâya, 4º Pâda, sûtras 47 a 50.]. El primero de estos términos designa literalmente un estado comparable al de un niño (bâla) [NA: Cf. estas palabras del Evangelio: "El Reino del Cielo es para los que se asemejan a estos niños... Quienquiera que no reciba al Reino de Dios como un niño, no entrará en él" (San Mateo XIX, 24; San Lucas  , XVIII, 16 y 17).]: es un estado de "no expansión", si se puede hablar así, donde todas las potencias del ser están por así decir concentradas en un punto, y realizan por su unificación una simplicidad indiferenciada, aparentemente semejante a la potencialidad embrionaria (Este estadio corresponde al "Dragón oculto" del simbolismo extremo oriental. — Otro símbolo que se emplea frecuentemente es el de la tortuga que se retira enteramente al interior de su concha.). En un sentido un poco diferente, pero que completa el precedente (ya que ahí hay a la vez reabsorción y plenitud), es también el retorno al "estado primordial" del que hablan todas la tradiciones, y sobre el que insisten más especialmente el taoísmo y el esoterismo islámico  ; este retorno es efectivamente una etapa necesaria en la vía que conduce a la Unión, ya que es solo a partir de este "estado primordial" como es posible rebasar los límites de la individualidad humana para elevarse a los estados superiores [NA: Es el "estado edénico" de la tradición judeocristiana; por eso es por lo que Dante   sitúa el Paraíso terrestre en la cima de la montaña del Purgatorio, es decir, precisamente en el punto donde el ser abandona la Tierra o el estado humano, para elevarse a los Cielos (designados como el "Reino de Dios" en la precedente cita del Evangelio).]. 351 HDV XXIII

Un estadio ulterior es representado por pânditya, es decir, el "saber", atributo que se refiere a una función de enseñanza: el que posee el Conocimiento está calificado para comunicarle a los demás, o, más exactamente, para despertar en ellos las posibilidades correspondientes, ya que el Conocimiento, en sí mismo, es estrictamente personal e incomunicable. Así pues, el Pandita tiene más particularmente el carácter de Guru o "Maestro espiritual" (Es el Sheikh de las escuelas islámicas, llamado también murabbul-muridin; el Murîd es el discípulo, es decir, el Bramachâri hindú.); pero puede no tener más que la perfección del Conocimiento teórico, y es por eso por lo que es menester considerar, como un último grado que viene todavía después de ese, mauna o el estado del Muni, como la única condición en la que la Unión puede realizarse verdaderamente. Por lo demás, hay otro término, el de Kaivalya, que significa también "soledad" (Es todavía el "vacío" del que se trata en el texto taoísta que hemos citado más atrás; y, por lo demás, este "vacío" es también en realidad la absoluta plenitud.), y que expresa al mismo tiempo las ideas de "perfección" y de "totalidad"; y este término se emplea frecuentemente como un equivalente de Moksha: Kêvala designa el estado absoluto e incondicionado, que es el del ser "liberado" (mukta). 352 HDV XXIII