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beleza corporal

quinta-feira 25 de janeiro de 2024

  

Perenialistas
Ananda Coomaraswamy  : Coomaraswamy Teoria Beleza - TEORIA MEDIEVAL DA BELEZA
El problema de la Beleza - belleza siniestra planteado en Proverbios 31.30 se examina mejor en el Opusculum de pulchro (de Alberto Magno), donde se indica que lo bello nunca está separado de lo bueno cuando se consideran cosas del mismo tipo, «por ejemplo, la Beleza - belleza del soma - cuerpo nunca está separada del bien del soma - cuerpo, ni la Beleza - belleza del alma del bien del alma; de modo que cuando a la Beleza - belleza se la llama así vana, lo que se entiende es la Beleza - belleza del soma - cuerpo desde el punto de vista del bien del alma». En ninguna parte se argumenta que la Beleza - belleza del soma - cuerpo pueda ser una cosa mala en sí misma; la Beleza - belleza corporal se entiende más bien como el signo externo de un bienestar o salud interior y constitucional. El que esta Beleza - belleza y salud, aunque un gran bien en sí misma, pueda llamarse también vana desde otro punto de vista será evidente para todos; por ejemplo, si un hombre está tan apegado al bienestar del soma - cuerpo que no arriesga su vida por una causa buena. Puede verse en Agostinho de Hipona   - San Agustín cuan poco concibe la filosofía cristiana la Beleza - belleza natural como algo siniestro en sí mismo; Agostinho de Hipona - San Agustín dice que lo bello se encuentra en todas partes y en todo, «por ejemplo en un gallo de pelea» (De ordine I.25; elige el gallo de pelea como algo en cierto modo despreciable desde su propio punto de vista), y que esta Beleza - belleza en las criaturas es la voz de Deus - Dios, que las hizo (confessio ejus in terra et coelo, Enarratio in psalmum, CXLVIII), un punto de vista que es inseparable también del concepto del mundo como una teofanía (como en Erígena  ) y de la doctrina de los vestigium pedis (como en Boaventura   - Buenaventura). Por otra parte, estar apegado a las formas como son en sí mismas es precisamente lo que se entiende por «idolatría», y como dice Eckhart   (Ed. Evans, I, 259), «para encontrar a la naturaleza misma, todas sus formas deben ser destruidas, y ello tanto más cuanto más cerca esté la cosa de hecho»; cf. Jami  : «Si temes beber vino del jarro de la Forma, no podrás apurar el trago del Ideal. Pero ¡ten cuidado! No te entretengas en la Forma: esfuérzate más bien con toda rapidez en atravesar el puente».

Pues «hay muchas cosas que son bellas para el ojo (de la sarx - carne) que difícilmente sería correcto llamar honestas» (honestus, Agostinho de Hipona - San Agustín, QQ. LXXXIII.30; cf. Platón, Leyes 728D, donde debemos honrar «la agathon - bondad por encima de la Beleza - belleza»). Es de esta misma manera como nosotros no elegimos para trabajar con ella la cosa más bella, sino la mejor para nuestro propósito (Summa Theologica I.91.3).


In magno corpore, lit. «en un soma - cuerpo grande». Sea lo que fuere lo que Aristóteles pueda haber querido decir, la estética escolástica no afirma de ningún modo que sólo las cosas grandes puedan ser bellas como tales. La cuestión es más bien que para la Beleza - belleza es esencial el tamaño debido; si una cosa está por debajo de tamaño, carece del elemento de estatura debida que es propio de la especie; una cosa enanecida puede ser elegante (formosus), pero no verdaderamente bella (pulcher), ni tener plenamente el ser (esse habens), ni ser enteramente buena (bonus), porque la idiosincrasia de la especie no está plenamente realizada en ella. De la misma manera, todo lo que está por encima de tamaño en su tipo no puede llamarse bello. En otras palabras, una definición de la Beleza - belleza como formal implica también la «escala».

En otra parte, Santo Tomás de Aquino   sustituye magnitudo por integritas (ver Summa Theologica, ed. de Turín, 1932, p. 266, nota 1), y dice que la obra es imperfecta nisi sit proportionata magnitudo, a menos que tenga el tamaño debido; (cf. Aristóteles, Ética a Nicómaco, IV.3.5). Tal vez deberíamos entender magnitudo como un tipo de «magnificiencia», o incluso como una cualidad «monumental».